jueves, 31 de diciembre de 2009

Centro isla norte

Buenas de nuevo a todos!
Antes de nada desearles a todos una buenisísísísma entrada de año 2010 (y parecía lejos...ciencia ficción, vamos) y en segundo lugar, agradecerles los comentarios, apoyos y cariños que recibimos de ustedes. De verdad que se valoran mucho. Nos hace también mucha ilusión que para algunos esté resultando una experiencia tan, o casi tan, valiosa como para nosotros mismos.

Ahora estamos en Wellington, capital de este eclectico país, después de pasar por la zona centro. Lamentablemente no tenemos fotos de los sitios espectaculares que hubiesemos querido pues la suerte ambiental, que va en rachas, nos ha traido lluvias y vientos que han impedido algunas excursiones.
Igualmente les contamos:


Esto fue lo que le dijo la mujer de Te Kupe (el primer explorador polinesio que llegó a Nueva Zelanda sobre el 1200 dC) cuando divisó algo a lo lejos. Por eso el nombre maorí de Nueva Zelanda es Aotearoa.







 
La maoría de los maoríes se tienen por expertos artesanos. Entre dichas artes se encuentra la de escultores de la madera. Sus tallas sus realmente bonitas y cargadas de simbología. Esta casita (pataka) es el lugar donde la tribu o alguno de sus miembros (por supuesto de alta casta) guarda sus tesoros (taonga) más preciados, tanto de tipo joyería-legado familiar como alimentarios.

El haka (baile) tiene muchas formas: intimidatorio, de bienvenida, para representar a tu gente,... son muy bonitos de ver, aunque algunos sean con los ojos en blanco y la lengua fuera.Nos hemos dado cuenta de que los malabares que tanto hemos visto (las bolas en el extremo de unas cuerdas) provienen de aquí. Las canciones, cantadas a 4-5 voces a la vez que se realizan los movimientos y bailes son muy embelezadoras (imaginamos por qué los primeros colonos se enamoraron...).
La zona de Rotorua está llena de actividad geotérmica. Éste es un géiser que se eleva hasta 30m. Hay baños de lodo (que dicen medicinales). En verdad la zona se autoproclama mística y saludable, pero el olor a huevo podrido mezclado con petardo del 15 no se va nunca y no sabemos si eso es bueno at all.
Fuimos a ver el Te Puia, un centro donde se explica la actividad geotérmica dentro del contexto histórico maorí. En realidad no te queda otro remedio ya que todos los géisers están dentro de explotaciones privadas. Dentro de ésta estaba también el instituto nacional de artesanía (cestería y tallas de madera).

Terrazas multicolores por precipitación.
La energía es usada desde la época maorí para cocinar los alimentos... ¡ y en otros lados matándose a encender hogueras!
Nos dimos un baño en una de las zonas "libres" donde se cruzan la corriente de dos riachuelos: uno caliente y el otro frío... fantástico! No hay más que ver las caras.



Las noches caravaniles están llenas de diversión con los juegos reunidos de... cartoni-preciosi! Aquí estamos elaborando nuestro ajedrez. Aunque estamos muy orgullosos de él, a Ana le ha picado el gusanillo y nos hemos sofisticado comprando uno en un todo a 100 (que luego fué todo a 1€ y aquí es sunny 2$).


















Nuestro apartado semanal de caravanas se completa con esta mostruosa caravana. Las hemos visto mayores e incluso con un camioneta delante ¡con grupo electrógeno!....tremendo para nuestros tiernos ojos canarios.


Este camping, a las afueras de Auckland, se notaba que estaba vivido por gente que residia allí permanentemente. En él tuvimos la única experiencia desagradable hasta el momento: en la cocina comunitaria, un maorí borracho y algo perturbado, odiador de alemanes y franceses (menos mal que no conocía a ningún español y no sabía donde meternos), sin un diente y con cara de loco, nos echó un tiento... menos mal que teníamos la sartén por el mango literalmente.



Por aquí se llega a Agaeteagaete... con la cachucha preparada y la guitarra.












Cena de Navidad. Brindamos por todos ustedes con laureado vino local. Reconfortante cena después de un día de emociones fuertes: entramos en el mundo de las cavernas de Waitomo a través de un agujero en la montaña que descendimos en un rappel de 40m.
Lo que allí vimos nos dejó atónitos: cavernas tamaño catedral, ríos y cascadas interiores, anguilas ciegas, concentraciones de nidos de luciérnagas que transformaban los techos en cielos estrellados... lamentáblemente no tenemos fotos.




Renzo aprendiendo a tocar algunas notillas. Parece que ayuda a alejar a las alimañas...

















Este bicho que pillamos in fraganti es un possum y, aunque para nosotros es de lo más adorable ya que se trata de un marsupial nocturno, en NZ es una plaga y están tratando de exterminarlos ya que destruyen el hábitat de los pájaros, entre ellos el Kiwi. También tienen el mérito de ser los bichos más escachados del país... nosotros vemos unos 10-15 al día en la carretera, en plan sello nacional.





En estas cascadas nos unimos a unos lugareños maoríes que estaban enseñando a sus hijos a saltar desde los árboles al río.








Nos contagiaron las ganas y nos dimos un chapuzón. el sitio, precioso y el agua fantástica, como en parque de atracciones dejándonos llevar por la corriente.















Anita reflexiva en un puente de la carretera SH43, la Forgotten World Highway, 150 km de bosques con un sólo pueblo Whangamomona, sin nada más que..












exacto: un pub-hotel de la época de los pioneros. Muy bonito pero de ambiente relativo. Consejo, sólo pedir una ración de papas.









Nos cautivaron estos árboles de color indefinible (bueno, Ana dice que gris azulino) que al alejarnos parecían enormes ovejas pastando... por si hubieran pocas!

martes, 22 de diciembre de 2009

PENÍNSULA DE COROMANDEL

Ya estamos saliendo de la Península de Coromandel. Un lugar precioso que conjuga a la perfección las zonas verdes con las playas. Es un sitio muy tranquilo que en verano se llena de gente del interior y de Auckland. Nos ha llamado mucho la atención las casas con grandes ventanales muy bonitas y que presuponen que el sentido de la intimidad aquí es diferente: la gente no curiosea hacia el interior de ellas (aparentemente) y es normal ver a las personas trasteando en sus casas con todo abierto... Les encanta la luz.
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Puhutukawas en flor en la costa de Thames, llamada así porque su rio a J.Cook se le pareció con el rio londinense.











Los pueblillos son del tipo Far-West pero con cierto encanto colonial. También hay que decir que los neozelandeses son bastante coquetos y lo tienen todo muy" arregladito y mono".








El tema caravanas es infinito en Nueva Zelanda. Las ves de todo tipo, año y tamaño. Es uno de los hechos que demuestra el caracter explorador de sus habitantes. En muchas casas puedes ver su caravana aparcada en el jardín y en otros sitios más remotos, ni si quiera casa... la caravana en un terreno mientras empiezan a edificar. Aquí van algunos ejemplos.

Preparados para todo

Nos adentramos en el Coromandel Forrest con un entorno mezcla entre los bosques europeos y los orientales... Hay gran cantidad de helechos que de hecho y por derecho son el símbolo nacional (una hoja de "fern").

Comienza la pateada que nos llevaría unas 5 horas... como habernos hecho unas cuatro veces la cuesta del Reventón de la Caldera de Taburiente (ños que pateo) y al día siguiente ni agüjetas ni na' ¡qué mostruos!

Ana en el interior de un kauri gigante cortado en la época de la tala masiva.
Fantástico baño fluvial después de la gran caminata. ¡Ossss qué rico!

En la nueva entrega de buzones curiosos con los que nos vamos topando, los ganadores de la semana van con temática "motor":


tremendos ¿no? creatividad sin límites.
Este es el paisaje que se ve recorriendo la costa de Coromandel: vegetación, playas y islas regadas por un mar de diversos colores. Los Puhutukawas se mezclan con las palmeras-helecho.


Uahu! una de playas. El sol, intensísimo, pero la brisilla y el agua bastante" fresquitas".

Playas calizas moldeadas por la erosión. A esta llegamos dándole al remo en kayak.

en plena faena. Vimos un montón de rayas y de placton del que va formando cadenas. Es una reserva marina (el nombre, muy complicado).

En cuanto a la comida, la verdad es que nada del otro mundo. Los fish&chips ingleses de siempre y lo demás son influencias externas: mucha comida asiática y fusión seudomediterránea. Así que, como la materia prima sí que es fantástica, cocinamos mucho en la caravana que además es más barato y sano.

Cierto día en el que cogimos nuestras paupérrimas bicis y llegamos a la playa de Hahei. Unos 26 kmtrillos de nada, que nos escaldó...el ánimo de volver a cogerlas. De hecho vamos a intentar cambiarlas por otras.

Es interesante que casi todas las fincas cuentan con sus propios panales de abejas. Estos conforman un paisaje muy característico. Y, no, no son cajas de zapatos. La miel más famaso es la de Manuka Tree, un árbol que te echa una manuca con eso de los catarros...ya que dicen los expertos que tiene más acción antibacteriana que los antibióticos. La venden segun MU (Unidades Manuka).

El rugby aquí es... todo. Lo viven desde pequeños como nosotros el fútbol pero con la diferencia de que todos tienen acceso a él. Todos los pueblos, hasta los más pequeños, tienen un campo que sería la envidia de los equipos federados españoles (incluso de los de fútbol). Me hizo mucha gracia éste campo infantil (como si fuera una cancha de minibasket) en un pueblo de menos de 500 hab.

Una foto que ilustra a la perfección el estilo de vida neozelandés. La gente sabe disfrutar lo que tiene. Todas las playas tienen una rampa por dónde en 5 min llega uno y baja su lancha o lo que se tercie. Mucha gente tiene un tractorcito para eso.

La amabilidad y la hospitalidad, a veces, ralla lo increíble. Este señor se llama John Wallace y después de charlar un rato con él (nosotros veníamos de darle 3 horillas al remo), nos vió desconsolados y ofendido por lo caros que son los alquileres, nos convenció para que cogiéramos su kayak cuanto quisiéramos. (por cierto, vaya abdominales para tener 75-80añitos).


No contento con eso, insistió hasta que nos quedamos a cenar con él y nos legó su "Queen-size-bed" por esa noche. Este hombre no sólo debería ser nombrado alcalde honorífico sino que encima tenía un libro de visitas (2) que hace palidecer a todos los que hemos visto hasta el momento. Lo bueno es que somos los primeros españoles en firmar en él.
Hot Water Beach: una playa alucinante. Hay sitio para los surferos con olas muy decentes y muchos "picos," para los niños en el rio que llegaba hasta ella, y lo mejor de todo:  aguas termales que suben hacia la orilla y cuando baja la marea se puede acceder a ellas.
Se forma un buen tinglao porque la gente se lleva sus palas para hacerse el spa casero. Y, lo hemos comprobado, el agua que se filtra sale ardiendo. Claro que la playa queda hecha un colador.

Playa de Opoutere, reserva para la anidación de Chorlitejos y aves zancudas. Una playa virgen increíble, pura e intacta (con estuario rio-mar). Para llegar a ella hay que pasar un bosquecillo muy mágico.

¡Hasta la próxima!



lunes, 14 de diciembre de 2009

PERCURSO POR EL NORTE

Hicimos noche en Taupo Bay. Un pequeñisimo pueblo costero. Levantarse con estas vistas y oyendo el mar. Todo un lujo.

Playa Matai, en la costa Noreste; dos playas gemelas de casi 360º cada una. Sólo había un grupo de escolares hacian snorkle. Contagiaban su jolgorio. El agua algo fría, pero nos bañamos.

Un/a Moa. Un tipo de avestruz. Este era el tipo de caza mayor que tenían los maoríes. Un huevo frito de esta especie alimenta una familia entera. Ahi andaba suelta entre vacas y caballos. Ella /el tan campante.

El  mundo del buzón casero es infinitamente creativo. Aqui un ejemplo: Un microondas reencarnado  en buzón....para recibir las noticias calentitas.










Otro ejemplo de buzón. Una tabla de surf. Cada buzón adaptado a su ambiente. Este está en la llegada a la playa de Piha,una zona bastante surfer y fashion.











En el norte abundan los paisajes con dunas gigantes rodeados de un verdor envidiable, y es que las dunas de aqui no son un  proceso de desertización sino acumulación de sedimentos de origen volcánico.










El hombre y la naturaleza.















Surcando el ríachuelo, llegas a la playa.
Un mar de sensaciones es pasear por en medio de este tesoro natural.













Tu sube, sube, que yo te espero abajo.





















Cabo Reinga. En punto más norte de la isla norte. Aqui se encuentran el océano Pacífico y el Mar de Tasmania en un abrazo constante. Este lugar es asombroso y sobrecogedor.











¿Son  capaces de ver un árbol que cuelga del roque más pequeño que se adentra en el mar? a través de sus raices entran las almas en el otro mundo para los Maoríes. Para ellos el otro mundo es la vuelta a casa, que es por donde ellos llegaron: el norte.









Pues nuestra casa queda.....por aqui.









Conduciendo un poquito por la 90mile beach. Interminable.














Vistas de la bahia Hokianga.















Árbol Kauri. Un símbolo para los NZ. Este árbol milenario llamado Tane Mahuta,de 1200 a 2000 años, mide 13 metros de diámetro. Imponente. No fuimos a verlo, sino  a pedirle audiencia.


















Un día de lluvia nos metimos en unas cavernas. Las Waipu Caves. Esta es la imagen de salida/entrada. En la inmensa oscuridad y pasmoso silencio de adentro, apagamos nuestras linternar y vimos un mar de estrellas: las gotas de agua que colgaban del techo eran fluorescentes conformando un precioso cielo estrellado dentro de esa caverna.







Los alcatraces en su época de cría desde la playa de Muriwai. Una playa muy ventosa, pero repleta de actividades para ello(kite, blokar, cometa, surf...) Estos alcatraces, que nos deleitaron con su particular cortejo, representan muy bien a la juventud NZ, ya que, los jóvenes se van desde aqui a Australia para volver a este sitio unos años después, formar una familia y hacerse su sitio en esta roca tan preciada.





Piha beach. Una zona con tradición surfera y con el club de rescate más antiguo de NZ. Hoy una playa con mucho ambiente surfer y donde se rueda un reality de rescate y sus fechorías varias.









En las playas de la costa oeste, la corriente y la resaca es tan fuerte, que los de rescate delimitan la zona de baño. Siempre con su lancha preparados por si acaso.











Algas en la playa. Eran tan grandes, y tan resistentes que daban para hacerse un neopreno, o lo que fuera....













Karekare Falls. Unas cascadas impresionantes muy cerca de la playa, donde se rodó la película "El Piano". Después nos dimos una pateada por esas montañas.



















Antes y después de salir del sendero, te invitan a desinfectar la suela de tus zapatos para evitar la degradación de los Kauris, y mantener el ecosistema de estos lugares. Se toman en serio la conservación. Chapó.














Yo, bebiendome las antípodas. Muy saludables.














La línea roja indica el recorrido hecho hasta ahora. Toda la parte norte. Nos lo tomamos con calma....